Lana
sube; lana baja
¿Qué
es?
Para Guillermo Sheridan,
en su cumpleaños.
en su cumpleaños.
No
le baja a la muchacha. No le baja. Y el chavo, ¿qué hace, en qué trabaja? ¡En nada,
en nada! Se le metió por los ojos a la muchacha y ahí lo tiene, echado en el
sillón el cabrón y ni mira para un lado cuando uno le habla. Ella le compra sus
cervezas y el otro no hace nada. No diga, seño. Yo he visto que se levanta bien
temprano. Cuando mis hijos se van a la escuela ahí lo ven salir. Mi niña, la
que va a la universidad se va a veces con él en el camión. Ya ve que está bien
feo por allá. Pues sí va de vez en cuando. Trabaja de chalán con su primo de
vez en cuando, pero casi no va. Claro, como la muchacha le da para lo que
quiera, pues cómo. Ya ve cómo son los hombres cuando se agarran a una de
pendeja…
Y
para esto, ¿qué hace la muchacha? Porque eso de estar manteniendo a un güevón
es caro. Si lo sabré yo, cuando el finado me vio la cara por tres años. Pues ya
ve que sí estudió la chamaca. Se llevó sus cuatro añotes. Desde entonces se
vino aquí. Pero como le consiguieron eso del gobierno, pues con eso se la lleva
más o menos y no se ha puesto a hacer lo que estudió. Ya ve que escribe y ahí
le mandan para sus libros y para vivir. Antes salía cada rato de viaje. Ahora
se la pasa afuera casi siempre, pero nomás va al centro, a las reuniones que
siempre hacen sus amigos. Ya ve que son entre semana, quién sabe por qué. Pero
ahora con esto, ya no va a poder. Ni para pagarme le va a alcanzar. Mi marido,
el muy cabrón, quiere que la saque a la calle en cuanto ya no pueda pagar, pero
no, seño; yo no voy a poder. La verdad que no, seño. Si es bien buena la
muchacha. Fíjese que cuando mis chamacos estaban más chicos, ella les estuvo
ayudando para estudiar. Como en la tarde no tenía nada qué hacer, se los traía
cortitos con las tareas. Por eso se aprendieron rete bien eso de la escritura y
hasta ahorita les siguen chuleando sus trabajos en la prepa.
Sí,
la verdad sí, por eso el gobierno le manda cada mes su dinerito. Pero ya ve
cómo es eso. Lo bueno es que sus muchachos sí le salieron buenos para el
estudio. Ni se crea, seño; sí estudian, pero para lo demás nomás en vacaciones.
La más grandecita, la que ya está en la universidad, es la única que se paga
todo solita. Y hasta me da para el gasto. Ay, doñita, pero están chamacos y
pues al menos cuando tienen tiempo ahí hacen algo, no como el güevón aquel que
del sillón no se para hasta que llama a su primo lpara sonsacarlo, sacar un
dinero y gastárselo con sus pinches amigos. Hasta la chamaquita anda en las
mismas. Sí es bien buena, pero ya ve que, aunque esto es casi cada mes, no le
gusta salir a otra cosa y sacarse a ese cabrón.
Ay,
seño, pero pues si el gobierno le manda, qué más le da a usted. En lugar de
andarla criticando, aconséjela. La muchacha es bien inteligente y seguro que ya
sabe que no está bien. Sus amigas ya le dijeron. Es la única que anda así de
jodida. También sus amigos le dicen, pero ellos también cada mes le andan
sufriendo. Al menos creo que ninguno de los otros se consiguió un parásito como
aquel. Ya ve que hasta la más lista cae a veces. Cuando llega, llega.
Pues
a ver qué pasa. Cada mes es lo mismo. Con ese cabrón tirado que nomás es bueno
para alargar la mano. Lo malo es que estamos angustiadas cada mes. Cada treinta
días es lo mismo. Y es que cómo le va a alcanzar si no quiere trabajar el otro
y a ella cada año se la renuevan y tiene que estar dale que dale cada mes.
Es
que así hay gente que cada mes es lo mismo, seño. Cada mes se trepan y están
dale y dale porque si no… no da. ¡Y que no da!: ese da cada ratito, hasta acá se
oye cómo anda sube que sube. Y eso que él tiene la culpa porque para eso sí
tiene tiempo, pero no para salir a trabajar. Y ella también se va para allá a
estar en eso. Porque si no, pues no. Ya ve cómo son allá arriba.
Que
le baje este mes, porque si no, no se va a poder. No van a poder, le digo.
¡Ya
le bajó ahora sí! ¡Ya le bajó!
¡Ya le bajó la beca!
¡Ya bajaron los recursos del FONCA!
César Alain Cajero Sánchez
No hay comentarios:
Publicar un comentario